miércoles, 13 de febrero de 2013

Cup cakes de chocolate

A veces me pregunto porqué me he embarcado en un blog de recetas y comida, ya ves, uno más.

 La verdad siempre me gustó cocinar. Hace mucho tiempo estudié psicología, en ese entoces supongo era una persona muchísimos años luz de lo que soy ahora, pero con la misma esencia. No me salió la carrera después de mucho madrugrar, estudiar, juntar los centavos para poder estirar una plata a la que siempre le faltaba un poco. No se podía, no se pudo, pero yo creo que aprendí un poco a centrarme, a vivir la vida de otra forma, teniendo mucho cuidado con mis decisiones. Después de aquél fracaso deseé con toda mi alma entrar en una escuela de cocina y aprender a cocinar para trabajar de cocinera, no aspiraba a más. Mi padre, no tenía dinero para mantenerme un día más en una ciudad distante, yo no tenía muchas fuerzas morales para ir contra viento y marea, desistí, pero mi espina con la cocina seguía.

Digamos entonces que este blog, es para ser escrito en los ratos mínimos que tengo libre. Ahora son casi las once de la noche, mañana debo madrugar ¿Acaso eso importa? , este es un capricho que ha llegado en una época en la que no tengo muy claro lo que debe ser mi vida y qué rumbo tiene que tomar. Mi aislamiento ha sido un maestro magestuoso, severo, pero a la vez tengo que estarle agradecida, me importan menos las cosas que poco deben importarme.



La siguiente receta es del mismo libro del que hablé en el post  cups cakes de vainilla. Quedaron deliciosas, aunque yo tal vez eché de menos un poco de licor en la masa. Este libro que me costó muy barato viene a ser una buena adquisición para mí.







El chocolate me gusta, pero de vez en cuando. No sé si es normal que ocurra, pero una vez hemos comido chocolate a mi me provoca comerlo no inmediatamente, sino después de pasado el tiempo.


La receta es muy sencilla, primero la mantequellilla, el azúcar, los huevos, luego la harina, el polvo de hornear el chocolate, enr ealidad yo no respeto mucho el orden, pero bien es cierto que hay que echar la harina poco a poco, no de zopetón, para que el aire de las masas puesa hacer efecto y levantar bastante en el horno.

lunes, 11 de febrero de 2013

Bollos de azafran, chocolate blanco y naranja

Quiero recomendar sinceramente el blog de Elena. Aunque nunca dejo ningún comentario allí, las recetas son absolutamente deliciosas, y creedme, personas poco familiarizadas con cualquier técnica culinaria; con sus didácticas recetas, aprenden a darle la vuelta, incluso, a lo que llamo las recetas peligrosas.
 Las recetas peligrosas son para mi aquellas que nos encantaría hacer, pero, con mover apenas mal la batidora, doblar el dedo con el que echas la sal, amasar un minuto menos, echar 3 gr. más de harina, dejar cinco minutos más el horno; la receta, sí señores, la receta se arruina, es un desastre, un completo conflicto y una profunda frustración.

Caos.

Pero con el blog de Elena y su fantástico talento para la didáctica culinaria, tu receta sale, aunque no lo creas, sale.

O es lo que me ha pasado a mí con todas las recetas que he hecho.

Así que en este caso, como he seguido la receta a cabalidad, sencillamente les invito a pasarse por su blog y mirar la receta que ella muestra, eso sí, les muestro mi resultado en fotos, no tiene pérdida.

lunes, 4 de febrero de 2013

RECETA DE CUPS CAKES DE VAINILLA

Buenas noches, escribo desde Alemania, una tierra en la que hacer un pastel es un deporte nacional. Mi enamoramiento con las cups cakes viene desde internet ¿Por qué lo voy a negar? Me gustan las cosas bellas. Considero que estos dulces proporcionan un placer estético que va más allá de su sabor. Son un ornamento, una recreación de los sentidos por sus colores, formas y la maravillosa combinación que aportan a una mesa de té. La gente vive deleitándose con las cosas bonitas y yo creo que lo hermoso tiene algo de divino, tiene algo vital, la vida, que es un pedacito de pan apenas, tan cortica, merece ser deleitada, merece ser saboreada y los segundos son manjares, porqué no ocuparlos mirando y haciendo arte, porque las cups cakes, para mí, son arte.

Esta receta la he traducido de un libro de recetas alemán, lean, loite, como dicen ellos, he hecho recetas de postres y la verdad, aunque el alemán sea un idioma tan endemoniado, prefiero hacer mil veces las recetas con los libros y las medidas que ellos dan en su idioma. Tienen fama, créanme, y si algún día vienen a hacer turismo por aquí, no dejen de comer sus pasteles, son deliciosos.

La receta me queda muy bien, he respetado las medidas con una precisión absoluta, ellos son muy exquisitos con esto de la exactitud, así que por favor, si la hacen, coménteme qué tal les salió, les aseguro que tienen buen pronóstico.

Lo que sigue, para no complicarles mucho la vida y no extenderme, es una demostración de mis resultados como cocinera de cupscaes, no soy profesional, pero la receta es genial, lo aseguro y serán alabados cuando la hagan.




Como dije, quedaron de maravilla, un truco para la butter cream, cuya receta, prometo ofrecer aquí paso a paso, es poner la mantequilla sin escatimar en grasa, ya que para que pueda quedar firme tiene que ser una pasada de calorías, sino, no queda.

Buen día y a hacer café para comer las cupscakes.

Sopa de zanahoria al jengibre

La siguiente receta la saqué de Yanuq, un sitio con una muy variada oferta en lo que a cocina peruana se refiere. Leí en el periódico hace poco que la cocina peruana fue declarada una de las cocinas más ricas, variadas e interesantes en el panorama de la cocina internacional. Confieso que no sabía ni mu de la sopa




Los ingredientes de la receta completos los presento a continuación. En realidad traté de respetar la receta pero confieso que los 700 gr de zanahoria son demasiados si usted quiere comer con su pareja o con su único hijo. La receta, tal como está es para servir de entrante a un arsenal de invitados.

Ingredientes


Preparación de la sopa a continuación

Y el resultado es: